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ESPECTÁCULOS | GUSTAVO CASENAVE "En Nueva York la competencia es feroz" ETIQUETAS: - música - tango - nueva - york - tocar Vota por esta Noticia: 4 votosComentarios: 0 El próximo viernes a las 20 horas el Teatro Solís recibe a un pianista y compositor uruguayo de excepción, que desde 1994 desarrolla una brillante carrera en Estados Unidos. Gustavo Casenave se presentará en el marco del ciclo "Los grandes músicos uruguayos", un espacio de reconocimiento a la excelencia artística de los mejores músicos orientales. Las entradas están en venta en la sala y en Red UTS, y valen $ 300, aunque los estudiantes de música pagan $ 30, presentando la respectiva constancia. En conversación con El País, Casenave dio detalles sobre este concierto y sobre su vida entre Uruguay y Estados Unidos. CARLOS REYES -¿Sabe qué repertorio va a hacer? -Sí y no. Este concierto va a ser muy particular, pese a que ya he tocado antes en esta modalidad. Puede que sea todo improvisado, o quizá también toque temas, cosas mías. Yo me muevo entre el jazz, el tango y la música clásica, y este tipo de concierto es un poco a lo que surja en el momento, en cualquiera de esos géneros. -¿Y con qué piano va a tocar? -Tampoco. Es una decisión difícil. Fui a ver los pianos y tienen dos Steinway: los dos están buenísimos, pero tienen como 100 años de diferencia entre uno y otro. El más nuevo tiene un sonido muy particular, pero el otro es una bomba, un animal distinto, pero está más viejo y se nota. No es que esté mal, pero la máquina está mejor la del otro. Cada piano tiene su alma, y si bien le tengo mucho cariño al viejo, lo más probable es que vaya a tocar con el nuevo. En un momento pensé en tocar con los dos, pero iba a ser para distraer. -¿Tiene algún mecanismo para no ponerse nervioso? -Yo hago mucha preparación, pero de ahora hasta el concierto no estoy tocando ningún tema, lo que hago es improvisar y tocar técnica. No estoy preparando un repertorio. Antes de tocar siempre me tomo un momentito -en general en el baño-, donde me quedo tranquilo. Pueden ser unos segundos: hablo conmigo mismo antes de tocar. Es una cosa rara, como una cábala. Es identificar ese momento, y después salir. Es una cosa muy espiritual. Es diferente a prepararse para un concierto en el que uno sabe qué va a tocar y qué no. -¿Cómo fue llegando a ese triángulo de jazz, clásica y tango? -Un poco por cómo se armó mi vida. Cuando era chiquito empecé a estudiar música clásica, que me dio una sólida base técnica, agarré una formación que me permitió pasar luego explayarme a los otros géneros. Luego, como a los 15, 16 años, me metí con todo en el jazz, al punto que fui a Estados Unidos, a Berklee, para estudiarlo. Y allí encontré todo el lugar que el jazz le da a la improvisación. Aunque lo valoro como música tradicional norteamericana, yo más lo veo como un vehículo de expresión. Para mí es una herramienta para la improvisación. Y cuando me radiqué en Nueva York, por 1997, allí todo el mundo llevaba su música propia, todas de distintos países. Y yo empecé a descubrir el tango, y me metí mucho. -¿Y qué le aportó el tango? -Yo descubrí el tango estando fuera, porque mi generación acá no lo escuchaba. Por más que luego te das cuenta que lo escuchabas cuando subías a un ómnibus o un taxi. Creo que el jazz me permitió trabajar mucho sobre la improvisación porque es como que está permitido en ese género. En el sentido que si con el tango empezás a hacer ciertas cosas, te dicen enseguida que te fuiste de estilo. En ese sentido el jazz es más abierto, aunque el tango me aportó el dramatismo, que también tiene la música clásica. -¿Cómo es trabajar de músico en Nueva York? -Nueva York es un país aparte, no hay con qué darle. Es otro planeta, y musicalmente también. Y tiene cosas buenas y cosas malas. Cosas malas: es muy difícil hacer algo, porque hay 800 mil millones de músicos importantes. Una competencia feroz para todo: para tocar, para encontrar trabajo. Cosas buenas: millones también, y son justamente las mismas. Está toda esa gente y eso te empuja: es una ciudad en la que no te podés quedar. La ciudad misma tiene una energía que te mueve para adelante. Y tenés acceso a tocar con gente de todo el mundo: es impresionante la cantidad de músicos increíbles, conocidos y no conocidos, de todos los países. Además de lo que toques, hay otros factores que pesan para que te vaya bien, como tener un buen publicista, o tener plata para promocionarte. PERFIL Nombre: Gustavo Casenave Nació: Montevideo, 1971 Edad: 40 años Otros datos: compositor CUENTAS EN DOS CIUDADES Según Casenave, la casa natal es algo así como tierra santa. Por eso hizo los temas "Luis de la Torre", "Vázquez y Vega" y "14 de Julio", que son las calles donde vivió de chico. "Yo en este momento pago cuentas en Nueva York y en Montevideo, dado que con mi mujer conservamos la casa de Nueva York y ahora estamos viviendo en Montevideo desde hace tres meses, y por tiempo indefinido. Somos una pareja de artistas, porque ella, Vichy Barranguet, es artista plástica. Tenemos una nena de nueve años y otra de tres, y siempre hemos vivido como errantes, por las giras y demás. Pero vivimos de la música y la pintura: toco madera". El País Digital Comparte Corrige y comenta Otras notas de Espectáculos SuDoKu "Soy más feliz solo, con mi esposa y mi guitarra" Un pintor uruguayo expone en Cadaqués 225 millones Museos privados: nueva iniciativa Susana criticó con dureza a Tinelli Variaciones de una bella y varias bestias