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Martes 15 de mayo de 2012 | Publicado en edición impresa Danza / Hasta el domingo Brenda Angiel vuela en Nueva York La coreógrafa presenta su espectáculo de tango Por Laura Ventura | Para LA NACION Comentá2 Angiel viajó con su Compañía de Danza Aérea. No sólo los artistas argentinos están representados en Broadway a través de Elena Roger, protagonista de Evita . La Compañía de Danza Aérea de Brenda Angiel presenta 8cho en una de las salas más antiguas de la ciudad, el New Victory Theatre, al ritmo de nuestro tango. La coreógrafa fue convocada para integrar una programación internacional apta para todo público. "Aquí no se había presentado anteriormente un espectáculo de estas características", dice. En 1994, Angiel, quien tiene una sólida formación en danza contemporánea, ensayaba una coreografía y se le ocurrió armar unos arneses y colgarse para experimentar otra disciplina. Así nacieron su escuela, su Compañía de Danza Aérea y su primer espectáculo de este tipo, Tres partes en la pared . Cada una de las obras que realiza Angiel le demanda un año intenso de producción. "En general primero hago las coreografías y después trabajo con los compositores, a los que les pido que escriban las partituras a partir de lo que armé", explica. En el caso de 8cho se reúnen tangos tradicionales y electrónicos, aunque también aborda otro tipo de ritmos. "Cuando me acerqué por primera vez al tango me pareció muy complejo y me costó encontrarle el punto justo. Me planteé qué podía darle de interés tanto al tango como a lo aéreo, pero me propuse salir de esa danza específica y quise crear algo distinto, porque si no, no valía la pena salir del piso", dice la coreógrafa. Angiel no rivaliza entre la danza tradicional y aquella, su especialidad, que se lleva a cabo en el aire: "Ninguna es más rica que otra, son dos lenguajes distintos". Lo que sí requiere la danza aérea son determinados elementos, como el arnés, el cordín y el mosquetón, para que el bailarín pueda suspenderse en el aire, además de interminables metros de sogas y escaleras. En comunicación telefónica desde Nueva York, donde perfeccionó su formación y donde permanecerá hasta el 20 de mayo realizando 8 funciones semanales, Angiel destaca que si bien 8cho no fue concebido para menores, son los chicos quienes tienen un especial disfrute con este espectáculo. "La danza aérea acerca, hace menos hermética a la contemporánea y acerca nuevos condimentos. Produce cierto impacto, sensaciones y un entusiasmo constante, que hace que sea más accesible para todos los públicos. En particular, me sorprende lo que les genera aquí a los niños", explica. Ella misma se reservó una pequeña parte para bailar, ya que como directora le gusta poder ver la función desde afuera. Las presentaciones de Angiel fuera del país continuarán en 2012. En julio la compañía viajará a Tel Aviv para presentar Air Condition en el Performing Arts Center, el centro de artes escénicas más importante de aquella ciudad. "Ensayamos mucho, demasiado, porque cuando llegamos a un nuevo lugar, tenemos muy poco tiempo para ajustar toda la parte técnica, detalles que son cruciales", explica quien también es pionera y maestra de una disciplina que crece cada día más en nuestro país.. ÚLTIMAS NOTAS DE ESPECTÁCULOS 10:57 Susana: "Lo voy a extrañar a Gasalla" 10:38 Tres cosas que no sabías de Dolores Fonzi 09:01 Pinti: "Tinelli lo va a exprimir a Gasalla, le va a sacar el jugo" Pianistas: una nueva mirada, otra generación Con el jazz como punto de partida, estos intérpretes dialogan con otros lenguajes como el tango, el folklore y la música contemporánea Por Mauro Apicella | LA NACION Comentá0 Trébol de ases: Guillermo Klein, Diego Schissi y Ernesto Jodos, referencias de la composición. Foto: LA NACION / Silvana Colombo De Adrián Iaies a Nicolás Guerschberg o Andrés Beeuwsaert, es evidente que los pianistas de extracción jazzística tienen mucho para decir con los teclados, con la composición o la improvisación, dentro y fuera de un lenguaje que podría ser considerado jazzístico. La prueba más evidente es la labor de tres de los más destacados músicos de la actualidad, Ernesto Jodos, Guillermo Klein y Diego Schissi, quienes, a pesar de generar músicas diferentes, son de la misma generación y comparten un contexto cultural. Ernesto Jodos viene de la presentación de un trabajo de música contemporánea en el Teatro Colón muy elogiado por la crítica. Sin embargo, no le escapa a la definición: "Soy un pianista de jazz", dice. Es posible que en lo más íntimo, su largo nomadismo (Argentina - Estados Unidos - España - Argentina) le esté pasando algún tipo de factura emocional a Guillermo Klein. Dice que no quiere que se mencione cuándo tocará en Village Vanguard de Nueva York (hace siete años que tiene ganado ese escenario) sino que quiere dar más conciertos en la Argentina. Pero no cabe duda de que todo ese periplo fue enriquecedor y quedó plasmado en una producción musical que no pasa inadvertida. Diego Schissi es uno de los músicos más inquietos de la escena local. Su avidez de música parece no detenerse. Un día sacó un pie del jazz para ponerlo en el tango. Ahora vuelve a reincidir en ese tango tan poco convencional. Aunque esta vez con invitados de extracción folklórica y cierta intención de homenaje o dedicatoria a varios colegas. Este viernes, a las 21, cierra el ciclo de conciertos con el que está grabando en Café Vinilo un nuevo disco en vivo, Tipas y tipos, con su grupo, y con el trío Aca Seca y la cantante Mora Martínez como invitados. En el fondo de una sala de música del barrio de Palermo hay un piano de media cola. En el frente hay una mesa, con tres cafés y las voces de estos músicos. Cuando el grabador se enciende la charla ya está empezada. Klein decía que en ocasiones se escriben obras que sólo se tocan un par de veces y que hay otras que se tocan todas las semanas. Para estas últimas "tenés que proveer una música que esté vital. Ese es el gran reto", decía. Volvamos unos párrafos atrás. ¿Dónde buscan la vitalidad estos músicos? Porque los jazzistas locales de las décadas del 50 y 60 se nutrían del exterior. En cambio, éstos parecen ver más hacia adentro. "Yo siento que no es adentro del país sino de uno. La música viaja muy rápido y en millones de formatos", dice Jodos. Y Klein agrega: "El tema es que los rótulos y estilos generalmente vienen de afuera. Y es jodido para nosotros que estamos adentro de la cocina". -La idea no es rotularlos sino contextualizar el momento y el lugar en el que están haciendo música. Schissi: -Creo que la necesidad es de buscar cosas que te nutran. Se nota cada vez que te acercas a una tradición o a un compositor. A mí del tango hay algo que me atrae. En otras épocas los géneros arrastraban a los músicos. En el 40 o el 50, el tango te llevaba puesto. Ahora eso no pasa. Cada género está con la necesidad de reinventarse. Creo que estamos todos en busca de ese sentido, cuando hay modelos ya perimidos. Jodos: -Boulez decía en un ensayo que el análisis es una herramienta importante dentro de la composición. Pero dentro de eso hay un análisis artístico. Seguramente si analizamos trabajos de Messiaen cada uno de nosotros va a enfocar hacia las preocupaciones artísticas personales. Esa manera de estudiar y escuchar a Björk o al grupo de Diego es la que te genera más cosas. Klein: -Y a la hora de crear hay que saltar al vacío. Por eso la cosa energética es tan importante. Después, cuando hacés el tema, lo ensayás y lo compartís con la gente, ese salto se transforma en un lugar más o menos sólido. Jodos: -Además, hay muchos sonidos dando vueltas en nuestras cabezas. No digo que todas las músicas son iguales, pero todos los sonidos son válidos. La mirada hacia adentro es encontrar los más cercanos a vos. Y si te ponés a tocar algo más de género, encontrar la manera de ser vos. Klein: -Ese es un gran punto. A pesar de que es vilipendiada, hay gente que se encuentra tocando la batería como Philly Joe Jones. Disfruta con eso. Y está bárbaro. Es una dedicación de vida. Quizás antes yo no lo veía así. Schissi: -Creo que tiene que ver con ciertas camarillas. Si uno dice, "vamos a cultivar tal época del jazz", formar parte de esa camarilla pareciera que te impide estar en otra. Klein: -¿Estaremos listos a nivel colectivo, como sociedad, para percibir sólo la energía de las cosas? -Hay un indicio. Los tres tocan músicas muy diferentes, pero pertenecen a la misma generación, se formaron en Estados Unidos y comparten en la Argentina un espacio musical común. Schissi: -Cuando la música está viva no importa si es vanguardia o algo conservador. Klein: -Yo vi a una banda en la trasnoche de Thelonious tocando música de Kenny Dorham y me gustó mucho más que las grabaciones originales. ¿Por qué? Porque las escuché en vivo. Bueno, si hay orquestas que vienen tocando Mahler desde hace 50 años, ¿por qué no va a haber las que toquen Kenny Dorham? Eso es positivo para que la propuesta energética en vivo sea variada y real. Yo la música del Cuchi Leguizamón la llevo desde que era chico, incluso sin saber que era suya. Resuena dentro de mí con partes mías. No es que uno pide permiso y se pone un poncho. Schissi: -El tema es cuando la música se museifica. -¿El disco que estás grabando en vivo se basa en dedicatorias? Schissi: -Es un proyecto dentro de otro. Sigo en la línea del tango contemporáneo, pero ahí se entreveraron algunas canciones, como regalos. Hay un tema para Spinetta, planeado antes de que pasara lo que pasó. También hay una dedicada a Emilio Barcalce, mi vínculo real con la historia del tango. Era un cacho de tango y yo lo tuve al lado. Otro para Guillemo [Klein]. Lo conozco de Nueva York. Siendo un par, sentí que quería hacer lo que él hacía. No de manera literal, claro. Ahí tenés un ejemplo: todos adoramos a Messiaen. Pero al lado tenés pares a los que admirás. -Y vos, Klein, ¿en qué andás? -Volver a vivir acá me ha llevado a hacer canciones. Reencontrarme con la palabra. Porque es increíble cómo vuela cuando te metés en un foro. En lo personal estoy tratando de proyectar algo. Quiero estar acá. Cuando hablan de mí hablan de lo que hago afuera. Pero acá le estoy poniendo todo. Me gustaría tocar en Mendoza, por ejemplo. -Jodos, ¿qué te dejó la experiencia de tocar en el Colón obras contemporáneas de Oscar Bazán y Cornelius Cardew? -Para mí siempre son personas. Tal vez sea, también, una cuestión generacional. Quizás eso le permite al nuevo director del CETC Miguel Galperín, llamar a Zypce y a mí, que venimos de otros lados, para hacer una retrospectiva de un compositor nacido en los setenta. Obviamente, si no hubiera una música lo demás no se existiría. -¿Vas a seguir trabajando en esa línea? -El Album de valses y el Treatise es una parte más pequeña de mi mundo, digamos que no lo veo dentro de mi circuito. Ahora voy a grabar temas de jazz con Pepi Taveira y Jerónimo Carmona. Mi vida musical está internamente bastante fragmentada. Mi cabeza funciona así.. ÚLTIMAS NOTAS DE ESPECTÁCULOS 10:57 Susana: "Lo voy a extrañar a Gasalla" 10:38 Tres cosas que no sabías de Dolores Fonzi 09:01 Pinti: "Tinelli lo va a exprimir a Gasalla, le va a sacar el jugo" 08:27 ¿A dónde fue, de dorado, la ex de Tévez? HOY Mick Jagger cantará en TV pero sin los Stones LO MÁS VISTO DE ESPECTÁCULOS ¿A dónde fue, de dorado, la ex de Tévez? 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